HIDRATACIÓN: VISIÓN GENERAL Con la llegada del buen tiempo, todos agradecemos desprendernos de las capas de ropa y los zapatos de más. Pero mantenerse hidratado a medida que aumenta la demanda de líquidos es esencial para maximizar el rendimiento y cuidar la salud. Escrito por Ted Munson 60 minutosCompartir ¿Cómo se mantiene fresco el cuerpo? Cuando hacemos ejercicio, el aumento de la actividad muscular provoca un aumento de la temperatura corporal. Nuestro cuerpo no tolera muy bien los cambios bruscos de temperatura y hemos desarrollado la sudoración como un mecanismo muy sofisticado para mantenernos frescos. Cuando sudamos, el fluido aleja el calor de la piel al evaporarse. Esto enfría el flujo sanguíneo cerca de la piel, lo que ayuda a mantener fresco el núcleo mientras la sangre vuelve a los órganos vitales al circular por el cuerpo. Con el tiempo, esta pérdida de líquido limitará nuestra capacidad para controlar la temperatura corporal y nuestro rendimiento durante el ejercicio si no lo reponemos. ¿Cuál es el riesgo? Un descenso del 2-3% de la masa corporal a través del sudor es suficiente para disminuir el rendimiento. Al deshidratarnos, la pérdida de sudor provoca una disminución del volumen de plasma sanguíneo, lo que reduce el volumen de sangre. El flujo sanguíneo a la piel se reduce para mantener el suministro al cerebro, los órganos y los músculos que trabajan. Esto provoca un aumento de la temperatura central, lo que conduce a la fatiga. A medida que disminuye el volumen sanguíneo, también se reduce el volumen sistólico (la cantidad de sangre que bombea el corazón por latido). Esto provoca un aumento de la frecuencia cardiaca para mantener el suministro de oxígeno al mismo ritmo de trabajo, lo que limita la capacidad de aumentar la intensidad. ¿Qué se puede hacer? Tu estrategia de hidratación debe ir más allá del agua. El cuerpo se esfuerza constantemente por mantenerlo todo en equilibrio, incluido el equilibrio de electrolitos y azúcares en el líquido que rodea las células. Como norma general, asegúrate de que tu orina es de color pajizo antes de empezar a hacer ejercicio. Esto indica que estás hidratado. Evite beber grandes cantidades de agua: Esto estimula a los riñones a intentar deshacerse del exceso de agua para mantener el mismo equilibrio de electrolitos en el torrente sanguíneo, ¡que es lo contrario de lo que se pretende! Electrolitos e hidratos de carbono: Al ingerir líquidos con electrolitos, especialmente sodio, se retiene mejor el líquido que se ingiere. Las bebidas con un 6-8% de hidratos de carbono también ayudan a maximizar la absorción de líquidos, ya que no se crea un gradiente de concentración. Calcula tu tasa de sudoración: La cantidad que necesitas beber varía mucho en función de la temperatura, la humedad y tu propia tasa de sudoración. Debes probar tus estrategias de hidratación en los entrenamientos antes de la competición para afinarlas. Intenta pesarte antes y después del entrenamiento. La diferencia es lo que has perdido a través del sudor, que puede oscilar entre 500 y 1000 ml de líquido por hora. GO Electrolyte le proporciona electrolitos y carbohidratos clave equilibrados para ayudarle a mantener el equilibrio de líquidos y suministrarle energía, permitiéndole regular su temperatura corporal central y hacer ejercicio de forma segura y eficaz. GO Hydro tiene una formulación de electrolitos similar, pero no contiene carbohidratos adicionales. Esto puede ser útil para sesiones más cortas de una hora o menos que no tienen el mismo requerimiento de energía. Escrito por Ted Munson Ted Munson Proporcionando conocimientos de primera clase, ideas de élite y recomendaciones de productos para ofrecer soluciones óptimas de rendimiento a todos los atletas en una amplia variedad de deportes de resistencia. Más artículos del autor